Ein feste Burg ist unser Gott – Partituras

“Ein feste Burg ist unser Gott” o “Nuestro Dios es un castillo fuerte” es probablemente el canto a la Reforma por excelencia. Achim von Arnim y Clemens Brentano incluso se refirieron a ella en su colección Des Knaben Wunderhorn como una “canción de guerra de la fe”, Heinrich Heine como la “Marsellesa del siglo XVI”. Aunque ciertamente es una de las más conocidas canciones de Martin Luther, no se conoce con precisión ni su fecha de origen ni la ocasión.

Su importancia y popularidad van mucho más allá de su época. No sólo sirvió de base para numerosas composiciones sacras, sino que Giacomo Meyerbeer también la utilizó en su ópera “Les Huguenots”, como hizo Richard Wagner en su “Kaisermarsch” para el restablecimiento del Imperio Alemán, o Claude Debussy en su obra para piano Felix Mendelssohn-Bartholdy adaptó la canción en el cuarto movimiento de su Quinta Sinfonía, la llamada “Sinfonía de la Reforma”.

Incluso en tiempos más recientes la canción sigue siendo de actualidad: Erich Fried escribió “Ein feste Burg ist unser Stammheim” tras el suicidio de Ulrike Meinhof y los activistas antinucleares de la década de 1980 cantaban “Ein feste Burg das Wendland ist”. ¿Qué habría dicho Lutero al respecto?